domingo, 2 de agosto de 2009

Todos los caminos vienen de Roma

"Aspice, Respice, prospice" (Mira el presente, observa el pasado, mira el futuro).
Esta máxima acuñada en la Roma Imperial, nos recomienda el ejercicio de la memoria para mejor comprender la compleja trama del presente y hasta poder intuir lo por venir.
A pesar de tiempos y distancias, la eterna ciudad y su cultura, de algún modo aún se nos presenta a diario. Revisando la historia romana, no es difícil reconocernos en los sueños, avatares, grandezas y miserias de aquella gente. Tampoco es difícil reconocer entre nosotros la supervivencia de sus costumbres, leyes, juegos... y, por supuesto, arte.
Naturalmente, entonces, he intuido correspondencias que vinculan a migrantes clandestinos del Siglo XXI, con los esclavos - gladiadores que en el circo de principios de nuestra era, ofrendaban su vida a algún César. El mismo circo monumental (por otra parte tan similar a nuestros estadios), donde me ha resultado absolutamente natural ubicar escenas de Wall Street, o una sesión de nuestro parlamento.
Tal vez solo unas pocas de las tantas perennes creaciones de la política romana: "Panem et circences"



"Difficile est satiram non scribere" (Es difícil no escribir sátiras)
Óleo - 1,80 x 1,80 mts.

"Ave Caesar morituri te salutant" (Salve César, los que van a morir te saludan) - Óleo - 1,60 x 1,60 mts.

"Panem et circenses" (Pan y circo) N°2 - Óleo - 1,80 x 1,80 mts.

"Aspice respice prospice" (Observa el presente, mira el pasado, ve el futuro) - Óleo - 1,80 x 1,30 mts.

"Panem et circenses" (Pan y circo) N°3 - Óleo - 1,70 x 1,40 mts.




"Pila non maculate" (La pelota no se mancha) - Óleo - 1,80 x 1,30 mts.





De los Portegnomos

Portegnomos: extraños habitantes de un mítico y subterráneo Buenos Aires. Amantes del tango, fieles seguidores de carismáticos líderes políticos, fanáticos hinchas de fútbol, son también melancólicos, machistas, supersticiosos y gustadores de probar su coraje en memorables duelos a cuchillo.
Según oscuras leyendas, cierta vez, una comunidad de incorregibles portegnomos, hizo asados utilizando como leña los parquets de sus flamantes departamentos.
Refieren las mismas fuentes la costumbre de estos sujetos, de convertir en maceteros las bañeras de las mencionadas viviendas
Se dice que, desde las profundidades que habitan, sólo perciben de nuestro mundo los cimientos y raíces.
Pálido reflejo de nuestra identidad, o silenciosos constructores de ella, los Portegnomos nos contemplan con su único ojo inquisidor, mientras añoran un pasado en el cual nos atrevimos a imaginar un destino propio.


"Sagrado Corazón de los Portegnomos" - Óleo - 1,80 x 1,20 mts.



"Apuntes del carnaval en La Boca" (o Baco y los Portegnomos)

"De cuando los Portegnomos hicieron asados con el parquet de sus flamantes departamentos"
Óleo - 1,40 x 1,00 mts.




"Una noche en La Ideal" - óleo - 1,00 x 1,00 mts.




"Tango del Portegnomo y las sirenas" - Técnica mixta - 1,00 x 1,00 mts.




Serie de las máscaras venecianas

Uno de los originarios y tradicionales sentidos del carnaval, sería el de restitución de un espacio temporal que suspende el orden establecido, permitiendo el contacto con “otras realidades”.
Emblemático por su carga historico-simbólica, el carnaval veneciano despliega su pintoresquismo en una ciudad que más se asemeja a una gigantesca escenografía, inversamente duplicada en sus aguas.
Multiplicado en innumerables pinturas, esculturas, monumentos y diseños varios, nos acecha por
doquier la figura de un león que no es un león, sino el evangelista Marcos.
Una multitud de personas (disfraces y máscaras mediante), desarrollan el antiguo y simbólico ejercicio de jugar a ser otros.
Mientras, en las alturas, se destacan cúpulas que en su forma encierran la obvia alusión a otra bóveda: la de un cielo poblado por astros en cuyo agrupamiento extrañamente configurado, muchos intentaron escudriñar nuestros destinos.



"De máscaras, rinocerontes y unicornios" (o una pequeña cita de Pietro Longhi)
Acrílico - 1,60 x 1,60 mts.




"El teatro del mundo" (o pintura con Goldoni)
Acrílico - 1,60 x 1,60 mts.

"Cielos de carnaval" (o de lo Uno y lo múltiple)
Acrílico - 1,60 x 1,60 mts.



"La doble naturaleza de las cosas" - Acrílico - 1,70 x 1,70 mts.



"Máscara en San Marco" (o lo sagrado y lo profano)
Acrílico - 1,20 x 1,20 mts.




Serie de las tramas

“...Poncho de cuatro colores/ cuatro caminos quebrados
y un solo sueño de cobre/ está el changuito soñando...”
De “Indiecito Dormido” (A. Yupanqui)

Un hombre siente el llamado de su tierra y lo
traduce en canto.
"...Lo que está arriba está abajo..." decían los cabalistas, y de algún modo, Atahualpa Yupanqui lo supo. Porque de tanto amar y comprender los secretos de la tierra, su paisaje y su gente, se elevó hasta el cielo en forma de poema, guitarra y canto.
Los trazos que forman las soñadas constelaciones en los mapas celestes, se parecen a los que "dibujan" la tierra...
En los hilos entramados de un tejido, muchos han visto el símbolo de otra urdimbre: la que liga nuestra circunstancial existencia con el cosmos.
Quizá todas, huellas obradas por idéntica mano. La misma que con similares trazos formó el rostro del cantor.



"Robert Fludd y el carnaval de la Quebrada" - Acrílico - 1,90 x 1,40 mts.

"El jaguar y la noche" - Acrílico - 1,50 x 1,50 mts.

"Los Quilmes" - Acrílico - 1,90 x 1,40 mts.



"Las noches de Uquía" - Acrílico - 1,40 x 1,70 mts.




viernes, 31 de julio de 2009

Territorio de cruces

Muy cerca de la bajada del Puente Avellaneda, frente a una casa de chapa y madera, había un magnolio donde cada noviembre se instalaba la magia.
Hacia el 500 A.C., entre otras
perplejidades, Pitágoras nos señaló la sección áurea.
La Salamanca es una leyenda que se renueva cada vez que escuchamos cosas, por ejemplo, de Sixto Palavecino o Peteco Carabajal.
En el barrio de La Boca hubo un artista que simplemente creyó pertenecer a su entorno. Durante mucho tiempo, el "arte oficial" se empeñó en negarlo. Pero a Quinquela Martín su pueblo aún lo sigue amando.
A principios del Siglo XX, algunos actos chamánicos de Marcel Duchamp, convirtieron objetos vulgares en piezas de museo.
Entre 1913 y 1935, Carlos Gardel grababa humildes cosas que serían para siempre.
En el universo de los números transfinitos, el todo no es mayor que las partes. Y en las geometrías no euclidianas, la suma de los ángulos interiores de un triángulo es mayor o menor que dos rectos.
Gracias a Umberto Eco, nos dimos cuenta de las estrechas vinculaciones que era posible establecer entre Immanuel Kant y los ornitorrincos En muchas ocasiones, Miguel Diomede simulaba pintar naturalezas muertas, pero en realidad estaba haciendo visible el alma secreta de las cosas.
El Viernes Santo de 1727, Juan Sebastián Bach estrenaba "La Pasión Según San Mateo". Será, nomás, que Dios existe.
A veces en Tilcara, otras veces en la Boca, podemos cruzarnos por la calle con uno de nuestros artistas imprescindibles: Hugo Irureta.
En el piso del Duomo de Milán, un tanto escondidas, hay unas pequeñas baldosas con imágenes de los signos del zodíaco.
Según los Pitagóricos, el número diez aludía a la perfección. Evidentemente sospecharon que unos veinticinco siglos después, ése número brillaría en la espalda de Diego Maradona.
Conforme a un mito de la Cábala, es posible dar vida a un homúnculo de barro. Sólo es necesario conocer las Palabras Precisas.
Desde 1328, dentro del Palacio Público de Siena, hay un mural de Simone Martini que nunca he dejado de amar.
De a ratos suelo ser extremadamente ambicioso. Es entonces cuando doy en desear que alguna vez mis trabajos merezcan la suerte de ser rozados aunque sea por un borde de la sombra de alguna de éstas maravillas que, entre otras, tanto me ayudan a vivir.



"Mascarón de proa" - Acrílico - 1,00 x 1,00 mts.


"Mascarones y valijas" - Acrílico - 1,20 x 1,60 mts.


"El ángel de las orillas" - Acrílico - 1,20 x 1,20 mts.




















Seguidores